Una de las cosas más maravillosas de ser Viejenial es que llegó nuestro momento de cumplir sueños y de aprobar las asignaturas pendientes, y entre ellas destaca visitar el norte de Noruega para presenciar una Aurora Boreal, una de las experiencias más fascinantes que se puedan tener en la vida.
Ver y «sentir» los increíbles colores de la aurora bailando en el cielo ártico es uno de los sueños de muchos viajeros. Pocos lugares en la Tierra ofrecen tantas posibilidades para ser testimonio de este fenómeno como Noruega.
Las auroras boreales, también llamadas luces del norte, son un espectáculo de la naturaleza que sucede cada año entre los meses de septiembre y marzo. El norte de Noruega, por encima del Círculo Polar Ártico, es uno de los lugares más cómodos e interesantes del mundo para contemplarlas.
Visibles durante las largas noches del invierno ártico, las auroras se mueven por el cielo en cortinas de luz verde o blanca, cambiando de intensidad y adoptando formas diversas. Aunque pueden aparecer de muchas formas, lo más normal es que la aurora ártica sea verde o de tonos rosáceos, pero en épocas de actividad extrema puede cambiar a amarillo o carmesí.

Este bello fenómeno natural que cada invierno atrae a cientos de turistas hasta la zona norte del país nace del polvo solar que el campo magnético de la Tierra dirige hacia regiones polares.
Las zonas que tienen el privilegio de ver este fenómeno se ubican en el llamado cinturón de las auroras boreales que cruza por las islas Lofoten y sigue por la costa hasta Cabo Norte. Además, en Tromsø, conocida ciudad por ser la puerta del Ártico, se encuentra el observatorio de las auroras boreales e incluso cada año se celebra un festival musical dedicado a ellas.
Gracias a las pocas horas de luz, los lugareños y visitantes tienen muchas oportunidades para “cazar auroras”, aunque no puede garantizarse su aparición en un momento concreto, puesto que aparecen cuando el cielo es oscuro, no hay nubes y poca contaminación lumínica.
Al mismo tiempo que en esa época se disfrutan de las auroras boreales, también es momento de practicar actividades de invierno en la naturaleza noruega como trineos con perros o excursiones. Además, en Lofoten, desde hace cientos de los pescadores llegan en esta época para tomar parte en la famosa pesca invernal del bacalao, de ahí que las rorbuer (cabañas de pescadores) sean uno de los elementos más comunes en las imágenes de auroras boreales en esta zona del Norte de Noruega indiacialis.com. Las Auroras atraen cada vez a más viajeros españoles.

¿Cómo fotografiar una aurora boreal?
Todo aquel que consigue ver una aurora boreal desea realizar una instantánea de ese momento, para que no solo quede grabado en su retina, sino también en su cámara. Pero no todos son capaces de captar ese momento a la perfección. Algunos de los consejos para que las imágenes de las auroras boreales sean las mismas que se guardarán en la memoria son estos cincos:
Siempre que se pueda, hay que utilizar un trípode y un disparador. Son exposiciones muy largas y con ambos instrumentos se evitará que la foto salga borrosa al presionar el botón.
Es recomendable llevar baterías de repuesto ya que la temperatura es muy baja y eso hace que se descarguen más rápido. Además, es aconsejable guardarlas en los bolsillos, cerca del calor humano para protegerlas del frío.
Antes de tomar la fotografía, hay que desactivar el flash y ajustar la cámara en modo manual. Para aquellos que deseen trabajar posteriormente con las imágenes, es recomendable disparar en formato RAW para que se obtengan la mayor cantidad de datos posibles. Si la cámara lo permite, sería bueno disparar con JPG al mismo tiempo.
Por último, el uso de un gran angular aumenta las posibilidades de obtener una foto perfecta de la aurora boreal.
Más información sobre auroras boreales, entra en www.visitinorway.com y conocerás las posibilidades turísticas del Norte de Noruega en invierno.
Deja una respuesta